Muchas personas consultan con temor la primera vez que deciden iniciar un proceso psicoterapéutico, ya que si bien saben que es probablemente el camino a seguir para obtener ayuda, para hacer un cambio o para tener un espacio personal, muchas veces no saben que esperar del primer encuentro o de lo que será en sí mismo el proceso. Quiero que sepas que esto es normal, siempre dar el primer paso para salir de lo que sea que estes pasando dará miedo y ya estas siendo valiente al intentarlo.
En esta entrada te contare que puedes esperar de una primera sesión de psicoterapia desde mi experiencia como terapeuta pero también como paciente.
Primero es importante plantear que no todos los psicoterapeutas funcionamos del mismo modo en una primera sesión e incluso a lo largo de los procesos psicoterapéuticos con nuestros pacientes y esto es porque nos hemos formado desde distintos enfoques de terapia. Desde mi opinión no hay un enfoque que sea mejor que otro, pero si hay enfoques que pueden acomodar más o menos a un consultante o a su problemática por lo que es importante informarte antes del enfoque del terapeuta con quien estas pensando consultar y ver sus áreas de experticie.
Ahora bien, volviendo al tema principal te plantearé desde mi forma de trabajo y mi experiencia como paciente (donde también tuve estas inquietudes) lo que creo pueda serte útil para comenzar tu proceso psicoterapéutico y que sepas a grandes rasgos que puedes esperar de tu primera sesión.
Acogida y escucha
El espacio terapéutico es por sobre todo un espacio de acogida, donde serás escuchado y donde no se te juzgará.
Esto es sumamente importante ya que nadie puede juzgar el dolor que estes sintiendo ni invalidar tu emocionalidad, si bien es posible que tu actuar, tu conducta o tus actitudes no siempre hayan sido las mejores y que eso influyera en tu problemática, eso no te hace merecedor del sufrimiento que puedas estar cargando.
Un terapeuta te mostrara tus errores, de un modo comprensivo sin juzgarte por ellos, pero por sobre todo te acogerá y acompañara, ayudándote a buscar nuevas formas más sanas y adaptativas de enfrentar tus dificultades.
Si tu terapeuta te juzga, te hace sentir inadecuado o culpable, no parece escucharte en tu primera sesión o tiene alguna conducta o actitud que no te haga sentir bien te recomiendo probar cambiando de terapeuta, es probable que no se el profesional adecuado para ti, pero probablemente si haya muchos otros que te acogerán, no te rindas si tu primera experiencia de terapia no es lo que esperabas ya que a veces lamentablemente puede ocurrir.
Confidencialidad
Un proceso psicoterapéutico considera la confidencial como uno de sus principios éticos y como un derecho del paciente.
La confidencialidad significa que nada de lo que digas será expuesto o revelado por tu terapeuta, quien tendrá que hacer todo lo que esté a su alcance por el resguardo de tu información. Esto quiere decir que, por ejemplo, si algún familiar se acercara a tu terapeuta sin decírtelo antes para solicitar información de tu proceso tu psicólogo (a) está en la obligación de no entregar esa información y ponerte al tanto de la situación, o, en otro caso, tu terapeuta no puede compartir tu información con otros profesionales o personas sin que tu hayas dado tu consentimiento por escrito para ese caso en particular.
Como terapeuta dejo esto claro desde la primera sesión a mis pacientes y es de las primeras cosas que señalo al iniciar la primera sesión, incluso antes de ahondar en el por qué estas ahí.
Ahora bien, es preciso y también se informará desde el inicio que existen excepciones a la confidencialidad, es decir, casos en que como psicoterapeutas estamos en la obligación de abrir esta confidencialidad y recurrir a algún miembro de la red de apoyo del paciente para ponerlo al tanto de algunas situaciones puntuales.
¿Cuándo ocurre esto? por ejemplo, cuando esta en riesgo la vida de paciente, lo que puede ser por algún tipo de amenaza externa (ser víctima de violencia o abuso, extorsión, etc) o también cuando está en riesgo su vida a causa de presentar ideación suicida o conductas de riesgo con intención suicida. Otros casos son cuando el paciente pudiera estar cometiendo algún delito o conducta en el cual ponga en riesgo la integridad de terceros.
Incluso en ocaciones podría ocurrir que el terapeuta se vea en la obligación de presentar una medida de protección judicial en casos en donde la vida o la integridad del paciente corre riesgo (por ejemplo, en pacientes menores de edad que estén siendo víctimas de abuso sexual o violencia), ya que esto es coherente con la noción de PROTEGER al paciente y es un deber ético y legal hacerlo. En otros casos podría ser pertinente una derivación a otros profesionales en función de la gravedad de la sintomatología o dar aviso al colegio (en pacientes menores de edad) de algunos antecedentes para favorecer el despliegue de ayudad.
En todos estos casos cuando sea pertinente abrir la confidencialidad esto será previamente conversado, buscando el mejor modo de abordar la situación.
Encuadre terapéutico
El encuadre de terapéutico es la estructura que da forma al proceso de la terapia psicológica y es lo que la diferencia, entre otras cosa, de otros tipos de vínculos como la amistad u otros tipos terapias alternativas.
"Son pautas y reglas específicas de cómo, cuándo y dónde llevar a cabo nuestras consultas y un proceso terapéutico eficaz, saludable y que proteja a ambas partes mediante la práctica de los principios éticos establecidos es un pilar fundamental para la psicología". - ChilePsicólogos.
Aspectos como ¿cuánto durarán las sesiones? ¿cuánto durará la psicoterapia?, ¿qué ocurre si no puedo asistir y debo cancelar una hora, o, falto sin avisar? ¿cómo debo realizar el pago de mi sesión? o ¿qué pasa si me atraso y llego algunos minutos tarde? son algunas de las cosas que se aclaran y resuelven la primera sesión, brindando un marco de seguridad al proceso que esta iniciando, así cada una de las partes, terapeuta y consultante, saben que esperar del proceso.
En mi caso lo que hago actualmente es enviar un consentimiento informado a cada paciente que inicia su proceso de terapia antes de la realización de la primera consulta, donde se connotan los derechos y deberes del paciente y se informa acerca de algunos lineamientos básicos del encuadre terapéutico (re-programación de sesiones, inasistencias, retrasos, etc), pero además dejo un espacio en la primera sesión, normalmente al final, para resolver dudas o establecer algún ajuste que sea necesario co-acordar o realizar al encuadre.
La idea es que cuando te vayas de tu primera sesión no tengas dudas respecto al cómo, dónde y cuándo se realizará el proceso de terapia.
Motivo de Consulta Inicial y su posterior co-construcción
Cada paciente que asiste a psicólogo lo hace por algún motivo, incluso cuando aún no tiene tan claro ese motivo o no sabe ponerlo en palabras.
Hay pacientes que llegan a su primera sesión con una idea clara de su problemática o de lo que quieren trabajar, mientras que hay otros que si bien saben que necesitaban venir no siempre son capaces de poner en palabras lo que buscan o los aproblema, ya sea porque no sepan como ordenar sus ideas para expresarlo verbalmente o porque no tengan clara la razón de su malestar, esto es normal, no te angusties si llegas a tu primera sesión sin una claridad absoluta de por qué lo necesitas, se trabajará en descubrirlo y en ir co-construyendo tu motivo de consulta durante la primera sesión y las que sean necesarias.
Las razones para ir a psicólogo son muchas y muy variadas, pero todas validas. Hay personas que buscan un acompañamiento para atravesar un momento difícil, otras porque quieren conocerse más a sí mismas, hay también quienes están atravesando un periodo de crisis o tienen algún problema en alguna de sus relaciones vinculares que los afecta, así como hay otras personas que llevan años sosteniendo un dolor que no les permite avanzar.
No siempre es fácil hablar de todo lo que puedes estar o has estado pasando en tu primera sesión, pero intentaremos ahondar a grandes rasgos en tu situación para co-construir un motivo de consulta (que será nuestra guía a través del proceso de terapia) que te haga sentido. Es probable que no sea posible hablar de todo en la primera sesión, pero eso es normal, no es posible resumir todo lo que has estado viviendo en 45 o 50 minutos, sin embargo, habrá tiempo de explorarlo en las siguientes sesiones.
Al terminar la primera sesión la idea es que te vayas con una idea relativamente clara de lo que se comenzará a trabajar, ya que en conjunto se construirá un proyecto de motivo de consulta que ayudará a definir como continuará tu proceso.
Derivación o contacto con la red de apoyo
Muchas veces se necesita de más que solo la psicoterapia para estar mejor. Es posible que si durante tu primera sesión el terapeuta identifica que tu estado es de gravedad o riesgo (sintomatología extremadamente alta, ideación o intentos de suicidio, autolesiones o síntomas psicóticos, etc) tenga que sugerirte una derivación a otros profesionales ya que podría ser necesario un tratamiento multidisciplinario para abordar tu caso. Esta es una decisión a veces compleja, pero en algunos casos necesaria para preservar tu integridad y cuidarte, y podría tomarse en tu primera sesión o someterse a evaluación según como se vaya desarrollando tu proceso inicial de terapia.
También, como ya se mencionó al hablar de la confidencialidad, en casos de riesgo como por ejemplo presentar ideación suicida u otras conductas de riesgo podría ser necesario tomar contacto con algún familiar o persona cercana que pueda estar al tanto de tu situación y del proceso psicoterapéutico que estas iniciando.
Por último, no esperes consejos o una solución instantánea para tu situación
La psicoterapia es un proceso y como tal lleva tiempo. Lamentablemente no hay respuestas o estrategias mágicas que el o la terapeuta puedan darte para solucionar tu situación en tu primera consulta. La primera consulta es por sobre todo una instancia para conocernos, tu conocer a tu terapeuta quien te acompañará en este proceso y decidir sí consideras que es la persona más idónea para hacerlo y el o la terapeuta conocerte a ti y a lo que te aqueja y decidir desde su experiencia y conocimientos la mejor manera de ayudarte. Es también el espacio para ponerse de acuerdo respecto al proceso, sus etapas y para esclarecer las dudas que puedan surgir, pero no es el momento donde todo se solucionará.
Un buen terapeuta no te dirá cómo resolver tus problemas, pero sí te acompañará en el proceso de que tu puedas ir descubriendo formas y estrategias más sanas y efectivas de hacerlo. Sin embargo probablemente te iras de tu primera sesión con una sensación de alivio, de haber por fin puesto en palabras cosas que venían siendo reprimidas o que no sabias como verbalizar y también con una idea más clara de cómo afrontaras tu problemática.
Si tienes otras dudas o consultas relativas a tu primera sesión o al proceso de psicoterapia que quieras comentar antes de iniciar tu proceso no dudes en ponerte en contacto.
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